Archivo de la categoría: ENSALADAS Y ENTRADAS FRÍAS

PASTEL DE PESCADILLA

1 Kg. de pescadilla con hueso, un centro por ejemplo, limpia y descamada
2 cebolletas picadas
1 blanco de puerro picado
2 dientes de ajo
Aceite de oliva
1 pizca de brandy
1/4 l. de nata líquida
8 huevos batidos
Sal y pimienta

En una cazuela amplia, con agua salada, ponemos a cocer la pescadilla, a fuego muy suave, hasta que veamos que la carne se despega fácilmente de la espina. Más o menos serán necesarios unos 10 minutos, roto el hervor. Cuando podamos manejar el pescado sin quemarnos, lo desmigamos, retirando la piel. Las espinas pal gato.
En una cazuela, ponemos a cocinar a fuego muy suave, con una pizca de aceite, las cebolletas, el puerro y los ajos. Una vez bien tierno, tras 10 minutos de fuego, añadimos el brandy y lo dejamos reducir. Damos unas vueltas. Entonces mezclamos a esta mezcla gustosa el pescado desmigado, sin que hierva más para que no se seque.
Fuera del fuego mezclamos en un bol los huevos y la nata, salpimentando. Le añadimos el guisado anterior y mezclamos bien. Rectificamos el sazonamiento.
Introducimos la mezcla en un molde grande o dos pequeños tipo ?plumcake? que previamente habremos untado de mantequilla derretida y espolvoreado con pan rallado. Hornear al baño María a 180º C durante 20-30 minutos, hasta que la mezcla quede cuajada, sin pasarnos de punto para que el pastel quede jugoso y no seco. Lo comprobamos meneándolo aún en el horno y comprobando que los bordes estén cuajados y el interior tembloroso.
Una vez frío, lo desmoldamos y lo cortamos, acompañándolo con pan tostado y abundante salsa rosa o mayonesa.

ENSALADA DE TOMATE VIUDO

5 tomates maduros
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Salarlas. Rociar con el aceite y servir sin demora.

PIMIENTOS DEL PIQUILLO RELLENOS EN ENSALADA

2 latas de pimientos del piquillo
1 pizca de aceite de oliva
2 pimientos verdes cortados en tiras
4 cebolletas hermosas cortadas en tiras
1 diente de ajo picado
8 pedazos hermosos de bonito en aceite o en escabeche, de buena conserva
6 cucharadas de salsa de tomate
Perejil picado
Sal

Abrimos las latas y escurrimos los pimientos. Ponemos a calentar en una cazuela una pizca de aceite y metemos a pochar los pimientos verdes, la cebolleta y el ajo picado, con una pizca de sal. Dejamos que se hagan a fuego lento al menos durante 30 minutos, que cojan un ligero toque dorado. Mientras escurrimos el bonito y lo desmigamos.
Una vez la verdura pochada, la escurrimos, la metemos en un bol, le añadimos el bonito desmigado y la salsa de tomate. Lo ligamos bien, dando unas vueltas, añadimos un poco de perejil picado y rectificamos el sazonamiento si fuera necesario. Es el relleno de los pimientos. Entonces, los rellenamos, con cuidado que no se rompan o revienten.
Los colocamos en una fuente y los servimos rociados de salsa vinagreta o incluso de un all-i-oli bien ligero.

ENSALADA DE TOMATE Y CABEZA DE JABALÍ

4 tomates maduros
1 loncha muy gruesa de cabeza de jabalí cortada en dados
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Desperdigar por encima los dados de cabeza de jabalí. Sazonar muy ligeramente. Aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.

PIMIENTOS MORRONES ASADOS EN ENSALADA

15 pimientos asados, pelados, despepitados colocados en un bol con su jugo de cocción
5 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 cucharada de vinagre de sidra
1 pizca de sal
Unas hojas de perejil, o mejor de albahaca fresca, en finas tiras

Colocamos los pimientos en un bol. Los rociamos con las tiras de hierba, sea la albahaca o perejil, o los dos, porqué no y rociamos el conjunto con la vinagreta hecha en una taza, mezclando el aceite, el vinagre y la sal. La dejamos refrescar unos instantes en la nevera y la servimos.

ENSALADA DE TOMATE Y CEBOLLETA

4 tomates maduros
1 cebolleta pequeña en finas tiras
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Salarlas.
Desperdigar por la superficie de los tomates la cebolleta y aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.

PIMIENTOS VERDES RELLENOS EN ENSALADA

12 pimientos verdes alargados, con el menor número de pliegues posible
Aceite de oliva para freírlos
2 pimientos verdes cortados en tiras
4 cebolletas hermosas cortadas en tiras
1 diente de ajo picado
8 pedazos hermosos de bonito en aceite o en escabeche, de buena conserva
6 cucharadas de salsa de tomate
Perejil picado
Sal

Limpiamos los pimientos y los secamos, tal cual, sin retirarles ni los tallos ni sus semillas. Ponemos abundante aceite en una sartén y arrimamos a fuego vivo. En el momento que esté caliente, deslizamos los pimientos, dejando que se frían, de forma que se hagan y una vez escurridos se puedan pelar fácilmente. Es importante que no tomen color. Una vez templados, que los podamos manejar con las manos, les retiramos el rabo y los pelamos, pellizcando la piel que se levantará en forma de ampollas y tirando de ella para dejar la pulpa al aire. Los abrimos con cuidado y les retiramos las semillas. Hacemos mientras el relleno.
Ponemos a calentar en una cazuela una pizca del aceite usado en la fritura y metemos a pochar los pimientos verdes en tiras, las cebolletas y el ajo picado, con una pizca de sal. Dejamos que se hagan a fuego lento al menos durante 30 minutos, que cojan un ligero toque dorado. Mientras escurrimos el bonito y lo desmigamos. Una vez la verdura pochada, la escurrimos, la metemos en un bol, le añadimos el bonito desmigado y la salsa de tomate. Lo ligamos bien, dando unas vueltas, añadimos un poco de perejil picado y rectificamos el sazonamiento si fuera necesario. Es el relleno de los pimientos. Entonces, los rellenamos, con cuidado para que no se rompan más o revienten. La parte abierta del pimiento por la que habremos rellenado, la colocamos hacia abajo, para que no se vea.
Los colocamos en una fuente y los servimos rociados de salsa vinagreta o incluso de un all-i-oli bien ligero.

ENSALADA DE TOMATE Y MOZZARELLA

4 tomates maduros
1 queso mozzarella fresco en dados
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de cocina y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Desperdigar por encima los dados de queso. Sazonar muy ligeramente. Aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.
A este tipo de ensaladas con queso fresco les viene muy bien las hierbas como el perejil, la albahaca o el orégano frescos, troceadas toscamente y desperdigadas por encima. Que cada cual haga lo que le plazca.

POCHAS EN ENSALADA

1/2 Kg. de pochas cocidas y escurridas
2 lonchas cortadas muy gruesas de cabeza de jabalí cocida, en dados
2 huevos cocidos y pelados, picados
Perejil picado
2 puñados de pepinillos en vinagre picados
2 cucharadas de mayonesa
8 cucharadas de aceite de oliva virgen
2 cucharadas de vinagre de sidra
Sal y pimienta recién molida

En un bol mezclar las pochas con la cabeza de jabalí, los huevos cocidos, el perejil y los pepinillos. En una taza mezclar la sal y la pimienta con el vinagre y añadirle en fino cordón el aceite de oliva, batiendo con un tenedor. Añadir también la mayonesa.
Echamos este aliño sobre las pochas y mezclamos perfectamente. Las enfriamos en la nevera un rato antes de comerlas.

TOMATES RELLENOS DE BONITO CON ROMESCO

8 tomates maduros, medianos bien prietos, para rellenar
8 pedazos hermosos de bonito en aceite o en escabeche, de buena conserva
1 cebolleta picada
1 diente de ajo picado
Perejil picado
2 cucharadas de aceite de oliva virgen
16 cucharadas de salsa romesco (ver receta)
Sal

Si tienen el tallo unido al fruto, no les quitamos el penacho, para que queden más bonitos. Además, les hacemos a los tomates en la base una pequeña incisión, en forma de cruz. Ponemos abundante agua a hervir y cuando surjan los hervores introducimos los tomates, de pocos en pocos, manteniéndolos unos segundos en el agua hirviendo. Rápidamente los sumergimos en un baño de agua helada, para refrescarlos. Una vez pasados todos por el agua o escaldados como diría un cocinero laureado, los pelamos y les hacemos un corte en la parte superior, como si de una tapa se tratara. Con una cuchara pequeña y si acaso con ayuda de un cuchillo afilado, les vaciamos el interior, dejándolos huecos para poder rellenarlos. Reservamos la carne retirada para otros usos (hacer salsa de tomate, por ejemplo) y sazonamos el interior de los tomates con una pizca de sal.
En un bol deshojamos los pedazos de bonito, intentando no machacarlos mucho, para que se noten las capas al comerlo y añadimos la cebolleta, el ajo, perejil picado y el aceite de oliva virgen. Rectificamos el sazonamiento. Es el relleno.
En el fondo de los tomates, colocamos una cucharada de salsa romesco y sobre ella el bonito aliñado. Una vez los tomates rellenos, cubrimos con otra cucharada de salsa romesco y tapamos con las tapas. Rociamos los tomates con un hilo de aceite de oliva virgen y los servimos.