15 pimientos asados, pelados, despepitados colocados en un bol con su jugo de cocción
5 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 cucharada de vinagre de sidra
1 pizca de sal
Unas hojas de perejil, o mejor de albahaca fresca, en finas tiras
Colocamos los pimientos en un bol. Los rociamos con las tiras de hierba, sea la albahaca o perejil, o los dos, porqué no y rociamos el conjunto con la vinagreta hecha en una taza, mezclando el aceite, el vinagre y la sal. La dejamos refrescar unos instantes en la nevera y la servimos.