Archivo de la categoría: Bebida

SORBETE DE NARANJA AL CHAMPAGNE

Por cada 300 g de sorbete de naranja
1/2 l. de champagne bien fresco

Mezclamos en el vaso de una batidora los ingredientes, en pocos segundos y a una velocidad rápida, para que se haga una crema helada que verteremos en vasos bien fríos (los habremos metido con antelación en el congelador).
Las variantes son numerosas. Algunos meten además una pizca de nata líquida en la mezcla, otros un poco de refresco de naranja con gas helado, otros incluso zumo o cáscara de naranja rallada o una pizca de azúcar. Que cada uno le pille su punto.

SORBETE DE LIMÓN AL VODKA

Por cada 300 g de sorbete de limón
2 dl. de vodka ruso refrescado en la nevera o recién sacado del congelador

Mezclamos en el vaso de una batidora los ingredientes, en pocos segundos y a una velocidad rápida, para que se haga una crema helada que verteremos en vasos bien fríos (los habremos metido con antelación en el congelador).
Las variantes son numerosas. Algunos meten además una pizca de nata líquida en la mezcla, otros un poco de refresco de limón con gas helado, otros incluso zumo o cáscara de limón rallada o una pizca de azúcar. Que cada uno le pille su punto.

SORBETE DE LIMÓN AL RON

Por cada 300 g de sorbete de limón
2 dl. de ron blanco o añejo cubano refrescado en la nevera

Mezclamos en el vaso de una batidora los ingredientes, en pocos segundos y a una velocidad rápida, para que se haga una crema helada que verteremos en vasos bien fríos (los habremos metido con antelación en el congelador).
Las variantes son numerosas. Algunos meten además una pizca de nata líquida en la mezcla, otros un poco de refresco de limón con gas helado, otros incluso zumo o cáscara de limón rallada o una pizca de azúcar. Que cada uno le pille su punto.

SANGRIA DE TXAKOLÍ KAIA

1 botella de txakolí de buena calidad
1 naranja y 1 limón cortados en pedazos gruesos
1/2 Schweppes de limón
1/2 Schweppes de naranja
1 pizca de whisky
1 pizca de Cointreau
1 pizca de azúcar
Hielos

En una jarra hermosa, vaciamos la botella de txakolí. Añadimos una pizca de azúcar y los trozos de naranja y limón, que apretaremos con las manos para que suelten todo su zumo. Añadimos también los trozos de fruta aplastados. Añadimos el hielo, muy abundante y en trozos gordos y vertemos para finalizar las bebidas con gas, el whisky y el Cointreau. Dependiendo de la acidez del txakolí que empleemos, habremos de añadir más o menos azúcar. Probamos al final la sangría para saber si endulzamos más o no. Servirla sin demora.

SANGRIA FLAMENCA

1 l. de vino tinto joven
6 cucharadas de azúcar
1/4 l. de P.X., Pedro Ximenez
1 naranja y 1 limón cortados en pedazos gruesos
Hielos

En una jarra hermosa, vaciamos la botella de vino. Añadimos el de azúcar y los trozos de naranja y limón, que apretaremos con las manos para que suelten todo su zumo. Añadimos también los trozos de fruta aplastados. Añadimos el hielo, muy abundante y en koskorros gordos y vertemos para finalizar el P.X. Dependiendo de la acidez del vino que empleemos, habremos de añadir más o menos azúcar. Probamos al final la sangría para saber si endulzamos más o no. Servirla sin demora.

PONCHE DE LICOR “Tía Mari Carmen”

Las cantidades de esta receta son para hacer un fiestón. Y que cada uno acabe como pueda o se agarre a la que pueda.

1 Kg. de azúcar
1 botella de Cointreau
1/4 l. de ron añejo
1/4 l. de Benedictine
4 naranjas peladas en trozos
4 manzanas peladas en trozos
4 plátanos en rodajas
1 racimo hermoso de uvas, desgranado
2 peras peladas en trozos
4 ciruelas deshuesadas, peladas, en trozos
1/2 melón en dados
3 melocotones pelados en trozos naturales o en almíbar
2 limones enteros, con piel, cortados en gajos

Dejamos todos estos ingredientes en maceración, al menos 24 horas antes de la juerga, mezclados en una tinaja de barro grande o en una champanera descomunal o donde podamos. Las frutas podremos alterarlas según el mercado y nuestros gustos personales, añadiendo sandía, mandarinas, kakis, etc. Un rato antes de recibir a los primeros golfos y golfas, añadimos a este brebaje,

4 botellas de vino blanco (puede ser un buen txakolí)
6 botellas de cava o champagne brut, bien helado
Abundante hielo en cubos gordos

Damos unas vueltas, probamos la mezcla y empezamos la juerga. Lo bueno de esta receta es que, normalmente, uno acaba a las 6 de la mañana con una melopea enorme, muerto de hambre, comiéndose los trozos de fruta que quedan en el fondo y los restos de canapés o de tortilla de patatas reseca.

SANGRÍA

1 botella de vino tinto del año
2 cucharadas de azúcar
1 naranja y 1 limón cortados en pedazos gruesos
El zumo de 1/2 naranja y 1/2 limón
1/4 l. de moscatel de buena calidad
Hielos

En una jarra hermosa, vaciamos la botella de vino. Añadimos los trozos de naranja y limón y muchos hielos, machacando el conjunto con una cuchara de madera. Entonces añadimos el azúcar, los zumos de naranja y limón y dejamos que la mezcla macere unos minutos. Pasados, añadimos le moscatel, damos unas vueltas enérgicas y nos la chupamos bien fresca, con cuidado de no agarrarnos una manga potente.
Dependiendo de la acidez del vino que empleemos, habremos de añadir más o menos azúcar. Probamos al final la sangría para saber si endulzamos más o no. Servirla sin demora.

PATXARAN

1 Kg. de endrinas frescas bien maduras
3 l. de anís especial para patxarán
Unos granos de café

Lavar bien las endrinas en agua, secarlas y meterlas en una garrafa amplia, vertiendo encima el anís y el café, dejándolo tapado unos 3 meses, moviéndolo de vez en cuando para que los aromas y el color se repartan uniformemente.
Vimos cómo una abuela de El Espinal, contaba una a una las endrinas hasta cien, por cada botella de litro que elaboraba. Lo decimos por si aguien no sabe qué hacer los sábados por la tarde, a partir de mediados de Septiembre que es cuando el Prunnus spinosa comienza a estar en su punto de maduración por estos pagos. Por cierto, el nombre Pacharán viene de Basaran (basoko aran), ciruela silvestre.
Dependerá del gusto y la paciencia de cada uno el dejar el pacharán más o menos tiempo macerando, es cuestión de cogerle el punto. Algunos añaden además una pizca de canela en rama, alguna cáscara de limón o incluso de naranja.
No conviene dejar macerando mucho tiempo para que el patxarán no se oscurezca demasiado y porque a partir de los seis meses, el hueso de la fruta puede ir soltando algunas partículas tóxicas. Hay que filtrar el resultado, para dejarlo limpio y sin turbiedades. Con las futas maceradas que nos sobran, podemos hacer una mermelada estupenda. Tampoco conviene dejar envejecer mucho el pacharán, pues pierde color y sobretodo sabor afrutado.
Es mejor beberlo bien fresco o con unos trozos de hielo y acordarse de que a pesar de su sabor dulzón y tontorrón, el exceso produce mangas inolvidables. Tras la resaca de pacharán, uno es capaz de beber pis de mono antes que echar un trago de tan delicioso licor traicionero. Lo decimos por experiencia.

POMELADA

El zumo de 6 pomelos
Azúcar al gusto
Agua fresca
Hielo

Mezclamos en una gran jarra el zumo de pomelo y unas buenas cucharadas de azúcar, dando unas vueltas para que se disuelvan bien. Añadimos entonces unos cubos gordos de hielo y completamos hasta el borde con agua fresca, dando vueltas. Probamos la pomelada y si hace falta más azúcar, la añadimos, hasta que esté muy rica.
También la podemos hacer con gaseosa fría en vez de con agua, queda muy fresca, pero teniendo ojo con el azúcar que añadamos, puesto que la gaseosa tiene ya azúcar.
Si hacemos por costumbre esta bebida y la tenemos en la nevera, nos ahorraremos muchos gases molestos y dinero que es lo que produce y cuestan las bebidas gaseosas comerciales con que meriendan los más peques. Esto es el mejor refresco natural. Y barato.

LIMONCHELO

1 l. de alcohol etílico 95º
7 limones bien aromáticos y amarillos
1 l. de agua + 1 vaso
250 g de azúcar

En el alcohol etílico se introducen las peladuras de los 7 limones amarillos sin las partes blancas dejándolos macerar durante 10 días. Pasados esos días colamos la mezcla.
Por otra parte se hierve el litro más el vaso de agua con el azúcar. Una vez hervido, se deja enfriar 5 minutos, tras los cuales lo mezclaremos con el alcohol colado. Dejamos reposar unas horas. Metemos la bebida en botellas bien cerradas y en el congelador, para servirla. Cuanto más fresco esté, más se bebe y resulta más peligroso.