Archivo de la etiqueta: Tomate

ENSALADA DE TOMATE CON QUESO DE CABRA

4 tomates maduros
1 queso de cabra fresco en dados medianos
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Desperdigar por encima los dados de queso. Sazonar muy ligeramente. Aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.

ENSALADA DE TOMATE VIUDO

5 tomates maduros
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Salarlas. Rociar con el aceite y servir sin demora.

ENSALADA DE TOMATE Y CABEZA DE JABALÍ

4 tomates maduros
1 loncha muy gruesa de cabeza de jabalí cortada en dados
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Desperdigar por encima los dados de cabeza de jabalí. Sazonar muy ligeramente. Aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.

MUSLOS DE PAVO GUISADOS CON TOMATE

4 muslos de Pavo partidos en 6 pedazos
4 cebolletas picadas
4 dientes de ajo picados
1 blanco de puerro picado
1 vaso de vino blanco
1 Kg. de salsa de tomate muy sabrosa
Aceite de oliva y sal

En una cazuela amplia, vertemos 1 chorrito de aceite de oliva y lo arrimamos a fuego vivo. Sazonamos los muslos de pavo y los vamos sofriendo en dos o tres tandas en la cazuela, unos 5 minutos, de forma que queden bien dorados y crujientes, con cuidado de que no se quemen. Una vez toda la carne tostada y retirada a una fuente, en la misma grasa y en la cazuela, añadimos las cebolletas, los ajos y el puerro. Bajamos el fuego para que no se nos queme la verdura y la tenemos unos 10 minutos. Pasados, añadimos el vino blanco, dejamos que hierva unos 5 minutos y volcamos la salsa de tomate, volviendo a recuperar el hervor nuevamente. En ese momento añadimos los trozos de pavo dorados con el jugo que hayan podido soltar en el plato. Cubrimos la cazuela con una tapa y dejamos que se estofe al menos 20 minutos, de forma que la salsa reduzca y la carne se vuelva tierna y se despegue de los huesos. Si es necesario, al final rectificamos el sazonamiento.

ENSALADA DE TOMATE Y CEBOLLETA

4 tomates maduros
1 cebolleta pequeña en finas tiras
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de la mesa y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Salarlas.
Desperdigar por la superficie de los tomates la cebolleta y aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.

POLLO CON TOMATE

1?5 Kg. de pollo partido en pedazos medianos
1 vaso grande de vino blanco
4 cebollas picadas
4 dientes de ajo picados
1 puerro picado
1 l. de salsa de tomate
Aceite de oliva
Sal

En una cazuela amplia, vertemos 1 pizca de aceite de oliva y lo arrimamos a fuego vivo. Sazonamos el pollo y lo sofreímos en varias tandas, unos 10 minutos, de forma que quede dorado sin quemarse. Vamos retirando la carne a un plato. En la misma cazuela, quitando una pizca de grasa si abunda en el fondo, añadimos las cebollas, los ajos y el puerro. Bajamos el fuego y lo tenemos cocinándose unos 15 minutos. Volvemos a introducir los pedazos de pollo y añadimos el vino blanco, dejamos que hierva unos minutos y vertemos la salsa de tomate, volviendo a recuperar el hervor muy suavemente. Tapamos. Dejamos hervir lento unos 20 minutos, para que la salsa espese y el pollo se ablande. Al final rectificamos el sazonamiento y dejamos reposar para volver a calentar y servir. Es mejor si este tipo de guisos los dejamos reposar antes de comer.

ENSALADA DE TOMATE Y MOZZARELLA

4 tomates maduros
1 queso mozzarella fresco en dados
2 cucharadas de vinagre de sidra
8 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
Sal

Eliminar el pedúnculo de los tomates y con mucha precaución, ayudándonos de un cuchillo afilado, pelarlos de manera que sólo nos quede el fruto y su pulpa roja. La peladura del tomate, la desechamos. El tomate pelado en ensalada, sabe mucho más rico, aunque tenga un poco más de trabajo que el trocearlo, sin más.
Cortarlos en dos, apoyar su parte plana contra la tabla de cocina y cortarlos en gruesas rodajas. Disponerlas en un plato o fuente. Desperdigar por encima los dados de queso. Sazonar muy ligeramente. Aliñar la ensalada con el vinagre de sidra y el aceite de oliva virgen.
A este tipo de ensaladas con queso fresco les viene muy bien las hierbas como el perejil, la albahaca o el orégano frescos, troceadas toscamente y desperdigadas por encima. Que cada cual haga lo que le plazca.

POLLO CON TOMATE Y PIMIENTOS

1?5 Kg. de pollo partido en pedazos medianos
1 vaso grande de vino blanco
4 pimientos morrones verdes o rojos, en tiras anchas
4 cebollas en tiras
4 dientes de ajo picados
1 puerro picado
1/2 l. de salsa de tomate
Aceite de oliva
Sal

En una cazuela amplia, vertemos 1 pizca de aceite de oliva y lo arrimamos a fuego vivo. Sazonamos el pollo y lo sofreímos en varias tandas, unos 10 minutos, de forma que quede dorado sin quemarse. Vamos retirando la carne a un plato. En la misma cazuela, quitando una pizca de grasa si abunda en el fondo, añadimos las cebollas, los pimientos, los ajos y el puerro. Bajamos el fuego y lo tenemos cocinándose unos 25 minutos. Volvemos a introducir los pedazos de pollo y añadimos el vino blanco, dejamos que hierva unos minutos y vertemos la salsa de tomate, volviendo a recuperar el hervor muy suavemente. Tapamos. Dejamos hervir lento unos 20 minutos, para que la salsa espese y el pollo se ablande. Al final rectificamos el sazonamiento y dejamos reposar para volver a calentar y servir. Es mejor si este tipo de guisos los dejamos reposar antes de comer.

TOMATE CONFITADO

tomate-confitado.jpg

30 tomates de mata pequeños, del tamaño de una bola de golf
15 dientes de ajo
Aceite de oliva
Sal y azúcar
4 ramitas de tomillo
1 hoja de papel sulfurizado o de horno

Eliminamos el pedúnculo a los tomates y en su base les hacemos una pequeña incisión, en forma de cruz. Ponemos abundante agua a hervir y cuando surjan los hervores introducimos los tomates, de pocos en pocos, manteniéndolos unos segundos en el agua hirviendo. Rápidamente los sumergimos en un baño de agua helada, para refrescarlos. Una vez pasados todos por el agua o escaldados como diría un cocinero laureado, los pelamos y los partimos en dos, a lo ancho.
Con cuidado les retiramos todas las semillas gelatinosas del interior, dejando sólo su pulpa. Así tendremos 60 medios tomates pequeños. Los introducimos todos en un bol y los aliñamos generosamente con sal y aceite de oliva.
En una bandeja de horno o dos, según el tamaño de nuestro horno, extendemos la hoja de papel de horno (si no encontramos este tipo de papel, podemos utilizar papel de aluminio) y colocamos todos los tomates con la parte abombada hacia la bandeja, espolvoreándolos con el azúcar, las ramitas de tomillo y los ajos enteros, con su piel. Añadimos un chorrito más de aceite sobre cada unos de ellos y los introducimos en un horno a 90ºc, al menos 3 horas. Pasados, les damos la vuelta y los tenemos en la misma bandeja otras 2 horas más. El tomate debe quedar confitado, seco, deshidratado pero mantener su tonalidad rojo intensa, en ningún caso deberán dorarse o quemarse, sinónimo de excesiva temperatura.
Realmente hacer estos tomates es una pelmada, pero merece la pena el esfuerzo, pues se pueden utilizar en dados, desperdigados por una ensalada o picados, en una vinagreta.
Una vez todos fríos, lo mejor es conservarlos en un tarro con buen cierre, bien cubiertos de aceite de oliva virgen, en la nevera, no más de 90 días.

SALSA BRAVA

2 Kg. de tomates muy maduros
3 cebollas hermosas picadas
1 guindilla de cayena cañera
Aceite de oliva
1 pizca de azúcar
Unas gotas de tabasco
Sal

Añadir aceite a una cazuela y sofreír ahí las cebollas ligeramente sazonadas durante unos 35 minutos, junto con la guindilla. Pasados, añadimos el azúcar y los tomates maduros, lavados y troceados. Dejamos que a fuego suave vayan cociendo muy lentamente unas 2 horas o hasta que la salsa brava haya evaporado el máximo de agua y esté reducida. La sazonamos y si es necesario por estar ácida, le añadimos un poco más de azúcar. Al final, añadimos tabasco según nuestro nivel de ?macho-man? y la dejamos lista para acompañar por ejemplo unas patatas fritas y salsa mayonesa.
La podemos dejar así, natural o pasarla por un pasapurés para dejarla más fina, teniendo la precaución de volverla a hervir, para que recupere el color encarnado.