Archivo de la categoría: ENTRANTES Y APERITIVOS

FOIE GRAS SALTEADO CON MANZANAS

1 pizca de mantequilla
6 manzanas peladas y en gajos, rociadas de zumo de limón para que no ennegrezcan
1 pizca de azúcar moreno
1 chorrito de moscatel
1 chorrito de licor de manzana
8 gruesos escalopes de foie gras de pato fresco de 100 g. cada uno
Sal y pimienta recién molida

En una sartén añadimos el pedazo de mantequilla y arrimamos al fuego. Añadimos las manzanas y dejamos que se vayan caramelizando por espacio aproximado de 15 minutos, a fuego siempre medio. Pasados, añadimos el azúcar, le damos unas vueltas y las retiramos. Tienen que quedar tostadas. Las retiramos, pero seguimos con el jugo del fondo de la sartén. Le añadimos el moscatel y dejamos reducir a fuego suave, hirviendo hasta que quede una salsa ligera. Podemos añadir una pizca de mantequilla y unas gotas de licor de manzana. Salpimentar el foie gras y colocar una sartén a fuego fuerte. Una vez caliente colocar cuatro trozos de foie gras en la sartén. Cuando estén dorados por todas sus caras, voltearlos y bajar el fuego. Inclinar la sartén y bañar el hígado con su grasa. Tardaremos unos 2-3 minutos en hacerlo. Sacarlos de la sartén a un papel absorbente y hacer lo mismo con los otros cuatro trozos. Sobre el hígado colocamos las manzanas salteadas y rociamos con el jugo recién hecho.

MOLLEJAS DE TERNERA EMPANADAS

1 Kg. de mollejas de ternera limpias de pellejos
Aceite de oliva
3 dientes de ajo enteros
Harina, huevo batido y pan rallado
Sal

Colocamos abundante agua salada a hervir y en el momento que surja el hervor, introducimos las mollejas, añadiendo una pizca de vinagre. Dejamos que estén al fuego a borbotones continuos al menos 30 minutos. Pasados, las escurrimos y las dejamos enfriar. Con ayuda de un cuchillo afilado, retiramos todos los pellejos o bolsitas de grasa que pudieran tener en su exterior, dejándolas bien limpias. Las cortamos en escalopes bien gruesos. Las sazonamos. Arrimamos una sartén con los dientes de ajo y bastante aceite como para fritura. Dejamos que se caliente pausadamente para que coja sabor a ajo y vamos subiendo gradualmente la intensidad hasta que esté muy caliente. Retiramos los ajos y en ese aceite vamos friendo las mollejas pasadas por harina, huevo y pan rallado, de forma que queden bien doraditas. Las escurrimos y las disfrutamos.
Podemos añadir al pan rallado una parte de ajo picado y abundante perejil picado, antes de empanar en él las mollejas, para que una vez fritas tengan aún un gusto mucho más sabroso. Según gustos.

FOIE GRAS SALTEADO CON ZANAHORIA, MIEL Y CANELA

6 zanahorias grandes peladas y ralladas
Aceite de oliva
1 pizca de mantequilla
1 pizca de cáscara de naranja rallada
1 pizca de canela molida
1 cucharada de miel
8 gruesos escalopes de foie gras de pato fresco de 100 g. cada uno
Sal y pimienta recién molida

En una cazuela colocamos 1 pizca de aceite y mantequilla y las zanahorias. Arrimamos a fuego suave al principio y dejamos que se cocinen despacio para que vayan poniéndose tiernas durante unos 25 minutos, añadiendo un poco de agua y con la tapa puesta. Subimos entonces el fuego, destapamos y añadimos la naranja, la miel y la canela, dejando que las zanahorias vayan evaporando todo el jugo que hayan podido acumular en el fondo. Dejamos que se caramelice y la reservamos. Debe quedar con aspecto escarchado, si nos gusta más dulzón, le añadimos un poco de azúcar de caña y unas gotas de vinagre. Salpimentar el foie gras y colocar una sartén a fuego fuerte. Una vez caliente colocar cuatro trozos de foie gras en la sartén. Cuando estén dorados por todas sus caras, voltearlos y bajar el fuego. Inclinar la sartén y bañar el hígado con su grasa. Tardaremos unos 2-3 minutos en hacerlo. Sacarlos de la sartén a un papel absorbente y hacer lo mismo con los otros cuatro trozos. Servimos el hígado así hecho sobre la zanahoria guisada.

MOLLEJAS DE TERNERA REBOZADAS

1 Kg. de mollejas de ternera limpias de pellejos
Aceite de oliva
3 dientes de ajo enteros
Harina y huevo batido
Sal

Colocamos abundante agua salada a hervir y en el momento que surja el hervor, introducimos las mollejas, añadiendo una pizca de vinagre. Dejamos que estén al fuego a borbotones continuos al menos 30 minutos. Pasados, las escurrimos y las dejamos enfriar. Con ayuda de un cuchillo afilado, retiramos todos los pellejos o bolsitas de grasa que pudieran tener en su exterior, dejándolas bien limpias. Las partimos en escalopes medianos. Las sazonamos. Arrimamos una sartén con los dientes de ajo y bastante aceite como para fritura. Dejamos que se caliente pausadamente para que coja sabor a ajo y vamos subiendo gradualmente la intensidad hasta que esté muy caliente. Retiramos los ajos y en ese aceite vamos friendo las mollejas pasadas por harina y huevo batido, de forma que queden bien doraditas. Las escurrimos y las disfrutamos.
Podemos añadir al huevo batido una parte de ajo picado y abundante perejil picado, antes de empapar en él las mollejas, para que una vez fritas tengan aún un gusto mucho más sabroso. Según gustos.

TERRINA DE FOIE GRAS NATURAL COCIDA EN CALDO

1,2 Kg. de foie gras crudo de pato -aprox.2 hígados-.
Sal, pimienta blanca molida y azúcar
1 chorrito de armagnac
1 chorrito de brandy
1 chorrito de oporto
3 l. de caldo de carne ligero

Hay una operación muy delicada de hacer que es complicada para los no iniciados, que es retirar los nervios a los hígados. Para eso, lo mejor es operar con los hígados blandos, que no hayan estado en la nevera y se hayan mantenido e temperatura ambiente al menos 2 horas. Separamos el hígado en 2 lóbulos, uno pequeño y otro grande y haciendo una ligera incisión a lo largo de ellos, a poder ser abriendo en libro y por la parte de atrás, más rugosa, deslizaremos con cuidado la punta de los dedos o un objeto no cortante, para ir levantando los nervios sanguinolentos que atraviesan las vísceras. Hay que hacerlo con cuidado para no destrozar el hígado y que no nos dé un colapso, sobretodo sabiendo el precio al que está el kilo de foie gras. Otra opción es pincharlos profunda y delicadamente y mantenerlos unas horas en agua helada salada, para conseguir mínimamente que los vasos sanguíneos se vacíen de sangre. Todo este esfuerzo es para que al corte no aparezcan rastros rojos ni venas incómodas y desagradables para comer. Enfin, un trámite complicado éste pero imprescindible. Ya desnervados, los dejamos en una bandeja y los sazonamos con sal, pimienta molida y el azúcar, además de rociarlos con el armagnac, el brandy y el oporto. Los cubrimos con papel filme o de aluminio y los dejamos macerar en la nevera así unas 8 horas. En ese transcurso de tiempo, los volteamos para que se empapen por todos los lados por igual.
Colocamos una cazuela con el caldo a hervir, dejando que una vez alcanzado el hervor, enfríe hasta más o menos los 80ºc. Introducimos los lóbulos en el caldo y los dejamos 6 minutos de reloj por cada lado, retirándolos a una bandeja, para que el hígado supure y elimine impurezas. Extendemos dos hojas de papel filme o de aluminio y colocamos en cada una de ellas un lóbulo grande y uno pequeño, enrollándolos sobre sí mismos como si de un chorizo se tratara. Los cerramos en sus extremos y los apretamos bien.
Los dejamos enfriar al menos 24 horas en la nevera para que una vez fríos los podamos cortar en rodajas. Para cortarlos mejor hay que pasar el filo del cuchillo por agua caliente. De esta manera, el corte será más limpio, sin peligro de que se nos rompa la rodaja. Comemos con pan tostado. Esta terrina aguanta en la nevera por lo menos 15 días, bien tapada. El caldo bien caliente, habrá cogido un gusto y un sabor para cortar el hipo. Bien desgrasado, lo bebemos para rejuvenecer 10 años.

SESOS DE TERNERA REBOZADOS

2 sesos de ternera cocidos
Sal
Harina y huevo batido
Aceite de oliva para freírlos

Partimos los sesos en gruesos escalopes, intentando que queden enteros. Los sazonamos ligeramente y los pasamos por harina y huevo batido, friéndolos en abundante aceite de oliva, hasta que queden bien dorados. Los escurrimos y los comemos acompañados de una buena mayonesa con mostaza o con una ensalada de escarola bien alegre de vinagre, con unos lardones de beicon, por ejemplo.

TERRINA DE FOIE GRAS NATURAL COCIDA EN PORCELANA

1,2 Kg. de foie gras crudo de pato -aprox.2 hígados-.
Sal, pimienta blanca molida y azúcar
1 chorrito de armagnac
1 chorrito de brandy
1 chorrito de oporto

Hay una operación muy delicada de hacer que es complicada para los no iniciados, que es retirar los nervios a los hígados. Para eso, lo mejor es operar con los hígados blandos, que no hayan estado en la nevera y se hayan mantenido e temperatura ambiente al menos 2 horas. Separamos el hígado en 2 lóbulos, uno pequeño y otro grande y haciendo una ligera incisión a lo largo de ellos, a poder ser abriendo en libro y por la parte de atrás, más rugosa, deslizaremos con cuidado la punta de los dedos o un objeto no cortante, para ir levantando los nervios sanguinolentos que atraviesan las vísceras. Hay que hacerlo con cuidado para no destrozar el hígado y que no nos dé un colapso, sobre todo sabiendo el precio al que está el kilo de foie gras. Otra opción es pincharlos profunda y delicadamente y mantenerlos unas horas en agua helada salada, para conseguir mínimamente que los vasos sanguíneos se vacíen de sangre. Todo este esfuerzo es para que al corte no aparezcan rastros rojos ni venas incómodas y desagradables para comer. En fin, un trámite complicado éste, pero imprescindible. Ya desnervados, los dejamos en una bandeja y los sazonamos con sal, pimienta molida y el azúcar, además de rociarlos con el armagnac, el brandy y el oporto. Los cubrimos con papel filme o de aluminio y los dejamos macerar en la nevera así unas 8 horas. En ese transcurso de tiempo, los volteamos para que se empapen por todos los lados por igual. Las últimas 2 horas las pasará fuera de la nevera, para que cojan elasticidad y no estén duros como piedras al meterlos en la terrina. Los escurrimos e introducimos los lóbulos en una terrina de porcelana de 1?5 l. de capacidad, presionando bien para que no nos queden espacios libres. Metemos el molde en la nevera durante media hora para que endurezca. Precalentar el horno a 60-70º C, meter la terrina al baño maría -con agua caliente- en el horno y cocer durante 50 minutos. Sacarla del horno y dejarla a temperatura ambiente al menos durante 3 horas. Una vez fría, meter la terrina bien tapada a la cámara y tenerla ahí un mínimo 24 horas antes de degustarla. Para cortarla mejor hay que pasar el filo del cuchillo por agua caliente. De esta manera, el corte será más limpio, sin peligro de que la terrina se desmonte. Comemos con pan tostado. Esta terrina aguanta en la nevera por lo menos 15 días, bien tapada.

EMPANADILLAS DE CARNE DE VACA

20 discos de masa para empanadillas
1 cebolleta picada
3 dientes de ajo picados
3 cucharadas de aceite de oliva
600 g. de carne de vaca veteada, picada
15 cucharadas de salsa de tomate
Perejil picado
Huevo batido

En una sartén ponemos el aceite, los dientes de ajo, una pizca de sal y la cebolleta, arrimando a fuego muy suave. Dejamos que la verdura se vaya haciendo muy despacio por espacio de 20 minutos. Pasado este tiempo, subimos la intensidad del fuego y añadimos la carne picada dejando que se haga por espacio de unos 20 minutos, sin dejar de mover con una cuchara de palo, para que no se apelmace y quede bien suelta. La sazonamos y añadimos la salsa de tomate, dejando reducir, para que la carne se torne melosa y espese, reduciendo la consistencia. Añadimos el perejil. Dejamos enfriar el relleno. Estiramos los discos de pasta de empanadilla encima de la mesa, colocando en su interior una buena cucharada de relleno. Pintamos con huevo batido todo el extremo y las cerramos como si fueran medias lunas, pinzándolas o sellándolas con las púas de un tenedor. Las dejamos reposar en la nevera bien cubiertas. Podemos hacer dos cosas. Para que estén menos grasientas, pintarlas todas con huevo y hornearlas a 200ºc. unos 15 minutos hasta que estén doradas, o emplear el método tradicional, fritas en abundante aceite de oliva bien caliente, como se han hecho tradicionalmente, escurridas.

PASTEL DE PERLÓN

2 perlones hermosos, limpios y descamados
2 cebolletas picadas
1 blanco de puerro picado
2 dientes de ajo
Aceite de oliva
1 pizca de brandy
6 cucharadas de salsa de tomate
1/4 l. de nata líquida
8 huevos batidos
Sal y pimienta

En una cazuela amplia, con agua salada, ponemos a cocer los perlones, a fuego muy suave, hasta que veamos que la carne se despega fácilmente de la espina. Más o menos serán necesarios unos 10 minutos, roto el hervor. Cuando podamos manejar el pescado sin quemarnos, lo desmigamos, manteniendo la piel y rescatamos la carne sabrosa de la cabeza. Las espinas pal gato.
En una cazuela, ponemos a cocinar a fuego muy suave, con una pizca de aceite, las cebolletas, el puerro y los ajos. Una vez bien tierno, tras 10 minutos de fuego, añadimos el brandy, lo dejamos reducir y volcamos la salsa de tomate. Damos unas vueltas. Entonces mezclamos a esta mezcla gustosa el pescado desmigado, sin que hierva más para que no se seque.
Fuera del fuego mezclamos en un bol los huevos y la nata, salpimentando. Le añadimos el guisado anterior y mezclamos bien. Rectificamos el sazonamiento.
Introducimos la mezcla en un molde grande o dos pequeños -tipo plumcake-, que previamente habremos untado de mantequilla derretida y espolvoreado con pan rallado. Hornear al baño María a 180º C durante 20-30 minutos, hasta que la mezcla quede cuajada, sin pasarnos de punto para que el pastel quede jugoso y no seco. Lo comprobamos meneándolo aún en el horno y comprobando que los bordes estén cuajados y el interior tembloroso.
Una vez frío, lo desmoldamos y lo cortamos, acompañándolo con pan tostado y abundante salsa rosa o mayonesa.

SESOS DE VACA REBOZADOS

2 sesos de vaca cocidos
Sal
Harina y huevo batido
Aceite de oliva para freírlos

Partimos los sesos en gruesos escalopes, intentando que queden enteros. Los sazonamos ligeramente y los pasamos por harina y huevo batido, friéndolos en abundante aceite de oliva, hasta que queden bien dorados. Los escurrimos y los comemos acompañados de una buena mayonesa con mostaza o con una ensalada de escarola bien alegre de vinagre, con unos lardones de beicon, por ejemplo.