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PROFITEROLES RELLENOS DE HELADO

Profiteroles horneados y enfriados (ver receta)
Helado de nuestro gusto
Azúcar en polvo

Hacemos una incisión con la punta de un cuchillo o una tijeras en un costado de los profiteroles. Con ayuda de una cuchara o de una cuchara de bolas de helado, los rellenamos bien rechonchos y los vamos colocando sobre una bandeja o un plato. Los espolvoreamos con el azúcar en polvo y los servimos rápidamente para que no se derritan.

MELOCOTÓN MELBA

1 melocotón en almíbar partido en dos
Helado de vainilla
Salsa de frambuesas

Colocamos en el fondo de una copa de cristal de postre medio melocotón en almíbar con la parte plana hacia arriba. Lo rellenamos con abundante helado de vainilla, bien cremoso y lo cubrimos con la otra mitad de melocotón en almíbar, con la parte abombada hacia arriba, apretando para que se pegue bien al helado. Cubrimos con abundante salsa de frambuesas y servimos bien frío.

BANANA SPLIT

1 plátano maduro
Helado de vainilla, chocolate y fresa
Salsa de chocolate
Nata montada

Partimos el plátano maduro en dos y lo colocamos en una fuente pequeña. Encima le apoyamos las tres bolas de helado, cada una de un sabor diferente y vertemos la nata montada, con ayuda de una cuchara. Rociamos todo este tinglado con la salsa de chocolate y, a comer.
Podemos sustituir la salsa de chocolate por salsa de frambuesa e incluso espolvorear la superficie con frutos secos como avellanas tostadas o almendras.

SANDÍA CON HELADO

1/2 sandía bien dulce
Helado o sorbete del gusto que nos apetezca, a base de nata o de zumos de fruta

Pelamos la sandía y la troceamos en dados pequeños, colocándolos en un bol grande o en varios pequeños. Los dejamos unos minutos en la nevera para que se refresquen. A la hora de comerla, la rociamos con el helado o el sorbete que habremos dejado fuera del congelador 1/2 hora antes de comerlo, para que esté bien cremoso. Le damos unas vueltas con una cuchara y la comemos.

SOUFLÉE RÁPIDO, CÓMO HACER

1 lámina gruesa de bizcocho de mantequilla o 2 bollos de leche partidos en dos
Helado al gusto
1 pizca de aguardiente o licor al gusto
3 claras de huevo
2 yemas de huevo
2 cucharadas de azúcar en polvo
Para quedar como un pastelero profesional, haciendo trampa, colocamos en el fondo de una bandeja de horno o de molde de porcelana de souflée, la lámina de bizcocho o los bollos partidos en dos. Los mojamos generosamente con el licor elegido y apoyamos sobre ellos una buena ración de helado al gusto, bien cremoso.
Aparte en un bol batimos a punto de nieve con una pizca de sal y unas varillas, las claras de huevo, hasta que queden bien duras y montadas. Añadimos el azúcar, para que queden bien brillantes y en ese momento, con una espátula y dando vueltas, mezclamos al merengue las yemas de huevo rotas, para que el conjunto tome un tono amarillento.
Introducimos esta mezcla sobre el helado y los bollos o el bizcocho, debiendo quedar bien esponjosa, introduciendo el conjunto al grill de un horno, para que se tueste ligeramente. Al sacar del horno espolvoreamos con azúcar en polvo y servimos rápidamente. Falso souflée para quedar como reyes.

HELADO, CÓMO VOLVER CREMOSO CUANDO ESTA COMO UN LADRILLO DE DURO

Si vemos que se nos ha olvidado sacar el helado del congelador y dejarlo a temperatura ambiente, antes de comer, para que esté cremoso, hay una solución. Consiste en meterlo en el microondas a temperatura mínima o de descongelación durante unos segundos, tantas veces como sea necesario, abriendo la puerta y comprobando que se va derritiendo ligeramente y volviendo “comestible”. En el momento que veamos que lo podemos amasar con una cuchara y está cremoso, lo servimos sin demora.

HELADOS Y SORBETES: ¿POR QUÉ NO DAMOS RECETAS?

En este recetario no nos hemos complicado la existencia ni queremos acabar con la ilusión de todos vosotros en la cocina. Por eso no encontraréis la receta de una masa de hojaldre, de un helado o de un sorbete. Tampoco queremos volveros locos haciendo polvorones, mazapanes o yemas de Santa Teresa, de las que por cierto, tenemos muy buenas recetas. Por cierto, si disponeis de una sorbetera/heladora de calidad y ganas de complicaros la vida, podréis hacer estupendos cremas heladas con la mayoría de salsa dulces que os ofrecemos en el cápitulo POSTRES: Salsa inglesa de régimen, salsa de cacao, salsa de praliné, salsa inglesa, salsa de moras, salsa de frambuesas, salsa de chocolate, salsa de caramelo…
Pero esto es un verdadero recetario de cocina doméstica, «de casa» y la verdad, nunca podréis conseguir helados o sorbetes tan cremosos como los del italiano de la esquina, hojaldre como el que os venda horneado o fresco el pastelero o polvorones, mazapanes y yemas con la calidad de los que se venden en muchos comercios especializados.
Así que para ser prácticos, hemos ido al grano. Sin perder el tiempo con recetas decimonónicas y frustrantes (porque no salen). Así que si queréis liaros la manta a la cabeza, este no es vuestro libro, no os daremos ese gustazo.