450 g de bacalao desmigado, desalado y picado
1 cebolleta picada
2’2 litros de leche
75 g de mantequilla y 75 g de aceite de oliva virgen
2 huevos cocidos picados
280 g de harina
Unas gotas de aceite de girasol
Harina
Huevo batido
Pan rallado
Hervir la leche. Por otro lado en una cazuela amplia, cocinamos la cebolleta con la mantequilla y el aceite a fuego suave, durante unos 30 minutos, hasta que quede bien hecha. Añadimos la harina, dando unas vueltas y seguidamente la leche hervida, poco a poco, sin dejar de remover con una cuchara. Vamos trabajando al fuego sin dejar de remover por espacio de 15-20 minutos. Entonces añadimos el huevo picado y el bacalao salteado previamente con unas gotas de aceite de oliva en una sartén antiadherente. Rectificar el sazonamiento.
Verter la bechamel en una fuente embadurnada con aceite de girasol y dejarla enfriar, bien cubierta de papel filme. Con las manos bien enharinadas, dar forma a la masa en pequeñas bolas del tamaño que más nos gusten, pasándolas por harina, huevo y pan rallado. Las dejaremos reposar un rato antes de freírlas, para que no nos revienten.