1 bollo de pan hermoso, abierto en dos
8 anchoas en salazón escurridas
8 lonchas finas de queso graso de nuestro gusto, a poder ser que funda fácilmente
1 chorretón de aceite de oliva virgen
Colocamos en una bandeja de horno, al grill, el bollo de pan abierto con la miga mirando hacia arriba y lo dejamos unos minutos en el horno para que comience a tostarse. Sacamos del horno medio bollo, lo rociamos con el aceite de oliva virgen y colocamos encima las anchoas. Sobre el otro medio bollo colocamos las lonchas finas de queso y las dejamos unos minutos más en el horno para que fundan y tuesten ligeramente. Juntamos los dos medios bollos, apretamos, dejamos enfriar ligeramente unos segundos para no quemarnos y nos jamamos el bocata.
Esta versión es una más currada del clásico bocadillo frío de queso y anchoas, que también está muy rico. Pero los tiempos evolucionan y esta receta está mucho más sabrosa. Para los que quieran hacer la clásica, ya saben, encerrar entre pan y pan lonchas delgadas de Idiazabal y estirar unos filetes de anchoa en salazón y listo.