750 g. de frambuesas bien maduras
1/2 l. de helado, al gusto
Asegurarnos de que las frambuesas estén libres de bichos y de su rabo, duro y espinoso. Si es necesario las pasamos volando por agua y las escurrimos delicadamente en un trapo. Las servimos bien frías, en boles, acompañadas del helado, muy blando. Si está duro como una roca es desagradable comerlo y habrá de mirarse la receta de cómo ablandar el heldao cuando está duro como un ladrillo.