2 pollos hermosos y preparados para asar, limpios
1 limón partido en dos
El zumo de 1/2 limón
2 cabezas de ajos
Sal y pimienta recién molida
2 vasos de agua
En una gran fuente de horno colocar los dientes de ajo desperdigados, el cuello y las puntas de las alas de limpiar el animal y apoyar los pollos de costado, a los que habremos metido en su interior, en cada uno, medio limón. Rociarlos con el agua. Introducir la bandeja en un horno a 200ºc y tenerlos asando por espacio de 20 minutos. Pasado ese rato abrir la puerta del horno, rociarlos pollos con su propio jugo y reclinarlos sobre el costado ya asado dejándolos otros 20 minutos. Pasado ese rato, abrimos el horno y colocamos los pollos sobre su pecho, dejando su espalda hacia arriba y teniéndolos otros 20 minutos, durante los cuales los rociaremos una vez más con su jugo. Finalmente pasado este tiempo, ponemos los bichos con sus pechugas hacia arriba, los rociamos con el zumo de limón y terminaremos de asarlos hasta que se doren. Si fuera necesario en el transcurso de la cocción, añadimos un poco más de agua, si vemos que tienen sed y se secan. Siempre con humedad.
Colocar los pollos sobre un plato y cubrirlos con una hoja de papel de aluminio, dejándolos reposar por espacio de 15 minutos. Trinchar los animales en 4 patas y 4 pechugas. Repartirlos sobre una bandeja caliente y acompañar con rebanadas de pan tostadas en las que untaremos la pulpa de los ajos asados.